La OCDE
ha certificado en el informe Panorama de la Educación, algo que
cualquiera de nosotras sabe porque es la realidad de nuestras vidas: tenemos
mejor formación que ellos pero conseguimos peores empleos (si es que los
conseguimos).
En este informe se analiza la relación entre el empleo y el rendimiento educativo, y España no podía salir peor parada. Ocupa el 32 lugar de 38 países analizados, y está 7 puestos por debajo de la media de la OCDE.
¿Por qué? Algunos datos nos lo aclaran: según el INE nuestro salario medio anual es un 76,1% del masculino, unos servicios públicos cada vez más deteriorados, unos permisos muy desiguales en caso de maternidad-paternidad, y así podríamos seguir ad infinitum…
Así las cosas, ¿de verdad quieren que sigamos creyendo que en nuestra sociedad hay plena igualdad entre hombres y mujeres? ¿Quién puede aguantar esto? yo, no.
En este informe se analiza la relación entre el empleo y el rendimiento educativo, y España no podía salir peor parada. Ocupa el 32 lugar de 38 países analizados, y está 7 puestos por debajo de la media de la OCDE.
¿Por qué? Algunos datos nos lo aclaran: según el INE nuestro salario medio anual es un 76,1% del masculino, unos servicios públicos cada vez más deteriorados, unos permisos muy desiguales en caso de maternidad-paternidad, y así podríamos seguir ad infinitum…
Así las cosas, ¿de verdad quieren que sigamos creyendo que en nuestra sociedad hay plena igualdad entre hombres y mujeres? ¿Quién puede aguantar esto? yo, no.